El viernes daban comienzo con los típicos juegos infantiles.
Por la noche a partir de las 22:00 se enfrentarían varias parejas en el maratón
de tute. Un servidor se fue pronto para la cama y poder aprovechar el sábado.
A partir de las 11:00 de la mañana, se concentraban en el campo de la iglesia, varias motos antiguas de la marca SANGLAS. A su vez los paelleros de Migalpiri, se encargaban de cambiar el olor del pueblo. Una gran paella para 1000 comensales nos esperaba a todos los vecinos ya aquellos que estuviesen dispuestos a dejarse ver por el puelbu.
Después de una buena fartura, había que bajarla como fuese. Así que para eso, la comisión de festejos decidió organizar, una carrera de carretillos, en la cual me vi obligado a participar, con mi amigo Carlos. Duros rivales, uno de ellos Alberto el de la TPA. También tengo que decir, que en dicha carrera quedamos terceros en la general y primeros locales. Despues de la reventaura callo una buena siesta y la noche continuaba. Muy buenas orquestas y muy buena música. También me vi obligado a estar hasta última hora, por si no sabían salir del pueblo con semejante camión escenario.
Para rematar el lunes tocaba ir a cenar todos juntos al
campu. Para ello la comisión, organizo una corderada. A todo esto le tengo que
añadir los gaiteros, no pararon de tocar todas las mañanas, hasta el lunes.
Otras cosas las cuales no asistí fue el partido de soltero y casados, un espectáculo
de caballos bailando, la suelta el gochu……………….no daba para más. Parecía que había
corrió una maratón cada día. Bueno desde aquí dar las gracias a la asociación de
festejos y darles mucho ánimo para que repitan en los próximos años
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