101 peregrinos

Son muchas personas, voluntarios,  cuerpos de seguridad, etc. que se vuelcan en intentar que todo esto salga bien, cosa que es imposible y que nunca va llover a gusto de todos, mas cuando somos 1500 corredores. Por eso desde mi punto de vista, les doy las gracias del primero al último que se volcó en hacer posible este evento deportivo y que todas las críticas que les puedan caer,  se las tomen como constructivas y no como tal. 

Un poco sobre nuestra participación. Para comenzar entrábamos en una pista de atletismo en la cual no vi mucha organización, cada uno iba por libre y no se sabía donde era la salida,  así que nos metimos por donde pudimos. Cuando dan la salida nos vamos acercando a una de las puertas de esta pista de atletismo, por la que cogen como máximo unos 5 corredores, y por allí tenemos que salir unos 1500 pues primer embotellamiento en el cual echamos unos 6 minutos. Comenzamos a pedalear por una avenida ancha, hasta que a los 15 km llegamos a la primera pista fácil y sencilla, en la cual nos encontramos con el primer embotellamiento, cuando por fin salimos y conseguimos rodar augusto,  a los 5 kilómetros  otro embotellamiento, en los cuales perdías unos 20 o 30 minutos mínimos, en cada uno

 Estamos en el km 20 aproximado  rodamos otros 5km y nos meten por una trialera pero hacia arriba, con mucha agua y mucho barro. Todo esto trascurre en los primeros 25km en los cuales prácticamente, estamos los 1500 corredores muy cerca unos de otros y esto conlleva a unos atascos brutales.  

La consecuencia de este barro, repercutía en mi  eje pedalier, se le debió de meter barro y estaba  durísimo. Por suerte hasta el km 40 no pillamos mas atascos,  allí hay un avituallamiento y un mecánico que no me da gran solución, comemos algo y salimos como tiros, esta suerte no duraba mucho, en la mayor pendiente de la ruta, dos kilómetros más allá el eje pedalier se bloquea y ni hacia atrás ni hacia adelante, lo desmontamos como podemos, limpiamos un poco y desbloquea, al menos nos permite seguir

Coronamos la parte más alta de la prueba y empezamos a descender,  aquí la organización se lucio, nos meten por una trialera, que a mí no me parecía difícil, pero somos 1500 y no todos igual de locos, otro atasco mas. Cuando salimos de allí estamos hacia el kilometro 50 y parece que comienza a ir todo bien, podemos rodar bien sin atascos, hasta una subida por una trialera por la bajaba como  un rio, pero bien. La mala suerte estaba a la vuelta de la esquina antes de llegar al último control, hacia el kilometro 80 íbamos por un camino que solo cogía un ciclista, pues él estaba delante de mí, esquiva una piedra, cuando la veo trato de esquivarla y fue justo lo suficiente parar cogerla por el lado bueno levantarla y que vaya directa al cambio y me lo parta de cuajo. Unos metros más allá hay una bajada que me lleva a un control con mecánico, que no tiene patillas para el cambio y no me puede hacer nada. Me quita el cambio y me la deja en piñón fijo, hasta que uno metros más allá en las primeras cuestas se bloquea y ni hacia atrás ni hacia adelante, fin de la carrera nos  tenemos que conformar con los 80 peregrinos. Una pena estos 21 kilómetros que nos quedaban eran los mimos que al principio y no eran difíciles y nos encontrábamos bien de fuerzas.  Esto es algo que no dependía de nosotros, ni de la organización, mi compañero David padre se solidariza y decide acompañarme.

Cuando llegaba a casa mi amigo Diego me pregunta que con cual me quedaba, con los 101 peregrinos o con los 10000 del Soplao,  sintiéndolo  mucho por los 101 les falta mucho para compararse con los 10000 lo considero carreras diferentes.